miércoles, 23 de abril de 2008

REINGIENERIA PERSONAL

Los retos que tenemos en educación cada vez son mayores. Así como la reingienería se viene desarrollando en diferentes aspectos de la economía del país del mismo modo debemos llevarla a nosotros los maestros.

Si bien el término surgió en Japón y obedece al modelo económico imperante en nuestra sociedad globalizada, rescatemos de éste para aplicarlo a nuestra carrera profesional.

De acuerdo a Michel Hammer, se plantea repensar y rehacer los procesos de una organización en función de dos argumentos centrales:
El argumento pro acción, que Hammer define como la "cuña" y que consiste en la razón fundamental del porqué queremos o debemos cambiar. Si no tenemos una razón poderosa, no vamos a hacer el cambio. Es como cuando el doctor le dice al paciente que tiene que cambiar de régimen de vida o que se va a morir en un mes. Mientras más radical y contundente sea éste argumento "pro acción", más convencidos estaremos de hacer el cambio.

Si revisamos este argumento y lo aplicamos a la Educación "debemos cambiar maestros " no cambiar de maestros sino cambiar de ACTITUD. Si tu maestro sigues siendo egoísta, envidias a tus colegas, no manejas un control de tus emociones, te sientes autosuficiente y sientes que no tienes nada que aprender de los demás.... ya fracasaste y perjudicaste a todo el magisterio y si a eso le añadimos que participas directa o indirectamente en la corrupción (por no decirte "eres corrupto") con mayor razón. Es tiempo de cambiar de actitud ,dejar los lamentos y demostrar lo cuan capaces somos y lo que hacemos es porque amamos a nuestros alumnos que son nuestra razón de ser y porque amamos a nuestro país.

El segundo argumento es la pro visión, que Hammer define como el "imán" y que consiste en la visión que nos atrae, es decir el objetivo o el ideal que estamos buscando con el cambio. Mientras más clara sea la visión de lo que buscamos más fácilmente nos encaminaremos hacia ello y lo lograremos.

Les invito maestros y maestras a revisar su visión , sus aspiraciones y cuando logren estos objetivos que se proponen no se olviden de promover la práctica de valores como la solidaridad, la tolerancia, la fraternidad que tanta falta nos hace puesto que nuestro contexto nos lleva a una sociedad que compite, que es desleal,que discrimina y es egoísta. Debemos contribuir y fomentar una CULTURA DE AMOR CON AUTODISCIPLINA.